5 pasos para mantener tu regulador siempre en forma!

Un regulador moderno es un mecanismo extremadamente fiable. Tan fiable de hecho, que algunos buceadores usan sus reguladores en innumerables inmersiones y nunca han hecho nada mas que enjuagarlos. Sin embargo,  siguen funcionando, manteniendo el flujo correcto de aire año tras año.

                              

La verdad es que un regulador supone una inversión bastante fuerte, y cuando se gasta tanto dinero en algo, es lógico el querer cuidarlo y mantenerlo de la forma adecuada.  No hablamos de comprometerse a seguir unas normas estrictas, pero si de tomarse unos minutos después de cada  inmersión, siguiendo algunos pasos simples para ayudar a prolongar la vida útil y el rendimiento de lo que realmente es el componente más importante de su sistema de soporte vital.

Esto es todo lo que se necesita:

1. Después de la inmersión asegúrese de que el protector contra el polvo está en su lugar, de   un enjuague rápido al regulador con una manguera de baja presión para desprender los grandes trozos de tierra, arena o sal.

2. Ponga el regulador en un cubo o en la bañera con agua y déjelo reposar durante 10 minutos más o menos

3. Mientras esta en remojo, remueve la segunda etapa en el agua (sin presionar el botón de purga) para conseguir que el agua fluya a través de la boquilla y conducto de descarga.

4. Saque el regulador del agua, y de a la primera y a la segunda etapa un batido suave para eliminar cualquier exceso de agua en la boquilla. Luego colóquelo ligeramente enrollado lejos de la luz solar para secar.

5. Una vez montado el regulador en la botella, cuando le abra el aire presione suavemente la purga (da igual del regulador principal o el octopus) simulando como si estuviera en flujo continuo durante 3-5 segundos. Haciendo esto, disminuimos la presión que tenemos en la botella (200 atm.) a una presión mucho inferior, evitando de esta forma el golpe que recibe el pistón de la primera etapa a al abrir la botella.